Descubre el pan de maíz con pipas en una receta fácil y que combina la suavidad del maíz con el crujiente de las pipas de girasol. Perfecto para cualquier ocasión, este pan casero te sorprenderá con su sabor único y textura irresistible. Es una deliciosa variación del clásico pan de maíz que se originó en las cocinas rurales de América.
Beneficios de Comer Pan de Maíz con Semillas de Girasol
El pan de maíz con semillas de girasol no solo es delicioso, sino que también está lleno de beneficios para la salud. El maíz es una excelente fuente de fibra, lo que ayuda a mantener el sistema digestivo en buen funcionamiento y previene el estreñimiento.
Además, contiene antioxidantes que protegen al cuerpo contra los radicales libres y es una fuente de energía gracias a su contenido de carbohidratos.
Las semillas de girasol son ricas en ácidos grasos saludables, proteínas y vitamina E, que es un potente antioxidante. También contienen minerales esenciales como magnesio, hierro y potasio, que son cruciales para el buen funcionamiento del organismo. Incorporarlo en tu dieta es una manera deliciosa de cuidar tu salud y disfrutar de un alimento nutritivo y sabroso.
Aventura Culinaria
Preparar este pan es una experiencia que te conectará con las raíces de la cocina casera. Sorprende a tu familia con un pan que ofrece un sabor único que no encontrarán en cualquier panadería. Este es el tipo de receta que se convierte en un éxito garantizado en cualquier reunión. ¡Anímate a prepararlo y disfruta de un pan saludable y lleno de sabor en cada bocado!.
Pan de Maíz con Pipas de Girasol
8
raciones2
horas38
minutos300
kcalIngredientes
250 g de harina de maíz.
250 g de harina de trigo.
100 g de pipas de girasol peladas.
1 sobre de levadura seca de panadería (7 g).
10 g de sal.
350 ml de agua templada.
1 cucharada de aceite de oliva.
Instrucciones
- Mezcla los ingredientes secos:
En un bol grande, mezcla la harina de maíz, la harina de trigo, la levadura y la sal. - Añade el agua y el aceite:
Haz un hueco en el centro de la mezcla de harinas y vierte el agua templada y el aceite de oliva. Mezcla bien hasta obtener una masa homogénea. - Amasa:
Amasa la masa durante unos 10 minutos hasta que esté suave y elástica. - Añade las pipas:
Incorpora las pipas de girasol a la masa y amasa un poco más para distribuirlas uniformemente. - Deja reposar:
Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cúbrelo con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño. - Forma el pan:
Una vez que la masa haya levado, desgasifícala suavemente y dale forma de bolas medianas, de hogaza o colócala en un molde para pan. - Segundo levado:
Deja reposar la masa formada durante unos 30 minutos más. - Precalienta el horno:
Precalienta el horno a 200°C. - Hornea:
Hornea el pan durante unos 35-40 minutos, o hasta que esté dorado y suene hueco al golpearlo en la base. - Enfría:
Deja enfriar el pan sobre una rejilla antes de cortarlo.
Notas
- Se puede hacer un cilindro como una baguette. Ya esto depende de la forma que le quieras dar al pan.
- Variedad de pipas: Puedes sustituir las pipas de girasol por semillas de calabaza o nueces troceadas para un sabor diferente.
- Endulzante alternativo: Si prefieres un pan menos dulce, reduce el azúcar o usa miel como endulzante natural.
- Toque especial: Agrega una pizca de canela o vainilla a la masa para darle un toque más aromático.
- Conservación: Guarda el pan en un recipiente hermético para mantener su frescura durante más tiempo.
El pan de maíz con pipas de girasol es perfecto tanto para desayunos como para cenas ligeras. Sirve una rebanada tibia con mantequilla o acompáñalo con un poco de queso fresco. ¡La combinación de sabores te encantará! Si te gusta esta receta, no te pierdas nuestra receta de Pan de Centeno con Nueces.