Las galletas de jengibre son un clásico que evoca recuerdos de cálidas celebraciones invernales, especialmente durante la Navidad. Originarias de la Europa medieval, se popularizaron en Inglaterra y Alemania, donde el jengibre no solo era apreciado por su sabor, sino también por sus propiedades medicinales.
Su aroma especiado y su textura suave pero ligeramente crujiente las hacen perfectas para acompañar una bebida caliente o para disfrutar en cualquier momento del día.
¿Quién no ama ese aroma especiado que llena la casa al hornear galletas de jengibre? No solo son un clásico de las fiestas, sino que pueden transportarnos a momentos cálidos, como un abrazo familiar. Su mezcla de jengibre, canela y clavo crea un sabor único que evoca recuerdos de celebraciones y risas.
Beneficios Aportados
El jengibre es conocido por sus propiedades antiinflamatorias y digestivas, lo que convierte a estas galletas en una opción deliciosa y beneficiosa.
Además, contienen melaza, que es rica en hierro, calcio y magnesio, esenciales para la salud ósea y la producción de energía. Disfrutarlas con moderación puede ser una manera sabrosa de obtener estos nutrientes mientras te das un capricho dulce.
¿Te animas a sorprender a alguien especial con esta receta? Puedes hacerlas para una reunión familiar, como un detalle personal, o para dar un toque especial a tu negocio. ¡Deja que el aroma de estas galletas llene tu cocina y sorprenda a todos con su sabor!
Galletas de Jengibre
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raciones1
hora20
minutos10
minutos110
kcalIngredientes
1/2 taza de mantequilla (115 g), a temperatura ambiente.
1/2 taza de azúcar moreno (100 g).
1/2 taza de melaza (160 g).
1 huevo grande.
2 y 1/4 tazas de harina (280 g).
1 cucharadita de bicarbonato de sodio.
2 cucharaditas de jengibre molido.
1 cucharadita de canela.
1/2 cucharadita de clavo molido.
1/4 cucharadita de sal.
Instrucciones
- En un bol grande, batir la mantequilla y el azúcar moreno hasta obtener una mezcla ligera y esponjosa.
- Añadir la melaza y el huevo, y batir hasta que todo esté bien integrado.
- En otro bol, mezclar la harina, bicarbonato, jengibre, canela, clavo y sal. Incorporar esta mezcla a la mezcla húmeda poco a poco.
- Formar una bola con la masa, envolverla en papel film y refrigerar durante 1 hora para que sea más fácil de trabajar.
- Precalentar el horno a 180°C (350°F) y preparar una bandeja con papel para hornear.
- Estirar la masa sobre una superficie ligeramente enharinada hasta que tenga un grosor de 0.5 cm y cortar con moldes de figuras.
- Colocar las galletas en la bandeja y hornear durante 8-10 minutos, hasta que estén firmes al tacto.
- Dejar enfriar sobre una rejilla antes de decorar con glaseado si lo deseas.
Notas
- Para un sabor aún más intenso, prueba añadir una pizca de pimienta negra a la masa. Sorprenderás a todos con un toque picante que resalta los sabores especiados del jengibre y la canela.
- Usa moldes temáticos: Las figuras de estrellas, muñecos de jengibre o árboles de Navidad añaden un toque especial.
- Prueba con diferentes endulzantes: Sustituye parte de la melaza por miel o jarabe de arce para variar el sabor.
- Hazlas más crujientes: Extiende la masa más fina si prefieres una textura más crocante.
- Conserva bien las galletas: Guárdalas en un recipiente hermético para mantener su frescura durante semanas.
- Las 110 Kcal son por galletas (aproximadamente 20g cada una).
El placer de hornear galletas de jengibre no solo radica en el resultado, sino también en la experiencia de prepararlas. Es una actividad perfecta para disfrutar en familia, especialmente con niños, quienes se divertirán cortando formas y decorando las galletas.
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